¿Tu ordenador es demasiado lento para tus necesidades? Ésta es una de las principales quejas de los usuarios. Sobre todo de los que utilizan programas muy pesados que exigen mucho al sistema. Pero no siempre tienes que gastarte una fortuna para mejorar el rendimiento de tu disco duro. Una de las opciones puede ser el RAID 0, un conjunto de dos o más discos o SSD que pueden hacer que el dispositivo sea más rápido. RAID es una técnica que se desarrolló en los años 80, pero que sigue teniendo mucho éxito. Esto se debe a que el principio de funcionamiento de los discos duros no ha cambiado mucho desde entonces, aunque el almacenamiento y la velocidad hayan evolucionado mucho. Esta tecnología suele tener dos objetivos: hacer que el sistema de discos sea más rápido o más seguro. Cuando se trata de velocidad, el RAID 0 es el mejor. El RAID 1 se encarga de mejorar la fiabilidad de los discos. También es posible utilizar los dos métodos combinados, en lo que se conoce como RAID 10. Pero de momento, te explicaremos cómo funciona la primera opción. ¡Sigue leyendo y verás cómo esta técnica puede ayudarte a mejorar estos componentes!
¿Qué es RAID 0?
RAID es el acrónimo de Redundant Array of Inexpensive (or Independent) Disks, que puede traducirse como » Disposición redundante de discos baratos (o independientes)». Básicamente, son formas de conectar unidades de almacenamiento para que trabajen juntas. Dentro de esta técnica, existen algunas variaciones y el RAID 0 es una de ellas. En este caso, se trata de un conjunto de dos o más discos duros que permite dividir entre ellos el registro de la información. Así, la división de los datos graba parte de cada información en un disco, aumentando significativamente la velocidad del dispositivo. Es como si un archivo tuviera la mitad del tamaño que tenía antes, lo que acelera enormemente la grabación en los discos.
¿Cómo funciona el RAID 0?
¿Te confunde esta división? Entonces hablemos un poco más de cómo funciona el RAID 0. En primer lugar, es importante entender que cada byte de información está formado por unidades binarias llamadas bits. Cuando utilizas un sistema RAID 0, estas unidades se distribuyen y cada bit se coloca en uno de los discos de esta disposición. Esto acelera la escritura y la lectura, lo que supone una mejora general de la velocidad a la que se escriben y leen los datos. Para ilustrarlo, podemos hacer una comparación sencilla: es como tener que leer mil páginas tú solo o compartirlas con un amigo, donde cada uno lee la mitad simultáneamente. Llegaréis al final mucho más rápido.
Capacidad
La capacidad de almacenamiento del RAID 0 dependerá de los discos instalados en la matriz. Para obtener un resultado, simplemente multiplica la capacidad de cada disco por el número de discos que se utilizarán simultáneamente. Por ejemplo, si utilizas 2 discos de 1 TB, el resultado será una capacidad de 2 TB. Pero presta atención. Si utilizas un disco más pequeño y otro más grande, la capacidad siempre estará limitada por el primero. Un disco de 2 TB con otro de 4 TB, por ejemplo, hará que el conjunto tenga sólo 4 TB de capacidad total. Al fin y al cabo, la información se divide entre ellos y no hay posibilidad de escribir más datos en uno de los discos del arreglo.
Velocidad
Como has visto hasta ahora, la principal ventaja del RAID 0 es la ganancia de velocidad. Los arreglos de este tipo pueden duplicar el rendimiento de tu ordenador. Pero presta atención: en algunos sistemas de colaboración en equipo, la ganancia de velocidad puede no ser tan significativa como en aquellos en los que el usuario maneja la matriz en solitario. Por eso es importante evaluar si el RAID 0 es la mejor opción para tus necesidades.
Seguridad
Otro factor que debes tener en cuenta al considerar el RAID 0 es la seguridad. Como los datos se dividen entre dos (o más) discos, podrías perderlo todo si uno de los discos tiene un problema. Por eso, este tipo de disposición no se recomienda para almacenar datos muy importantes o de los que no se hagan copias de seguridad, por ejemplo.
¿Cuáles son los riesgos de implantar una disposición RAID 0?
Como ya hemos explicado, el RAID 0 no tiene forma de duplicar los datos. En otras palabras, resulta mucho más difícil recuperar tus archivos si uno de los discos falla permanentemente. Éste es el principal riesgo al implementar una disposición de este tipo. En el caso del RAID 1, por ejemplo, los datos se copian de un disco a otro. Esto no genera las ganancias de velocidad del RAID 0, pero sí mejora la fiabilidad. Por eso es importante evaluar cuál es tu principal necesidad al optar por estas disposiciones.
¿Es posible configurar arreglos RAID 0 con discos diferentes?
Puede que tengas un disco duro de repuesto en casa y quieras probar el RAID 0. Pero ten cuidado. No siempre es una buena idea. Los arreglos que utilizan discos de distintos fabricantes, modelos o capacidades pueden acabar causando problemas, porque el sistema tendrá que equilibrar constantemente el rendimiento de todos ellos. Esto puede provocar una sobrecarga. Además, los distintos componentes pueden tener capacidades diferentes para soportar variaciones de temperatura, golpes físicos, entre otros factores que provocan fallos en los discos.
¿Cuáles son las principales aplicaciones para utilizar RAID 0?
Como puedes ver, la ganancia de velocidad es la mayor ventaja del RAID 0. La fiabilidad, en cambio, no es su punto fuerte. Por eso es mejor utilizar esta disposición en situaciones en las que el rendimiento es más importante que la seguridad. Algunos ejemplos son la edición profesional de vídeo y audio, el renderizado, la postproducción, los archivos de transición y otras actividades de alto procesamiento con bajos costes de implementación. Lo importante es que tengas copias de seguridad actualizadas de estos archivos.
¿Cómo recupero un RAID 0?
Pero, como has visto, los discos duros están sujetos a fallos. Y si uno de tus discos empieza a fallar, es posible que todos tus datos queden inaccesibles. En estos casos, el primer paso es averiguar si el disco está desconectado o averiado. Para ello, apaga el ordenador y conecta el disco. Luego vuelve a encenderlo y comprueba si el problema se ha resuelto. Si el error persiste, es muy probable que uno de tus discos esté fallando. Lo ideal es que contactes inmediatamente con un servicio profesional de recuperación de datos. Los programas de recuperación, especialmente en un RAID 0, podrían acabar comprometiendo aún más tus archivos. Evita las soluciones mágicas de Internet y de ningún modo abras el disco. Esto sólo generará más daños físicos, que son muy difíciles de revertir. Empresas como Bot ofrecen recuperación de datos segura. Tenemos más de una década de experiencia en este campo y hemos atendido más de 60.000 casos, con una tasa de éxito del 95%. Las posibilidades de resolver tus problemas con un profesional son mucho mayores, así que confía en quienes tienen experiencia. ¿Quieres saber más sobre Bot? Síguenos en Instagram, Twitter y Facebook y descubre más sobre nuestro trabajo.
